Sé el villano en lugar del héroe, asedia en vez de defender, y conquista el mundo, un reino a la vez. En lugar de construir torres y defenderte de hordas de monstruos, se te dan las riendas de un mago malvado que construye su ejército desde cero para dominar las tierras. Debes desbloquear nuevas unidades, aprender nuevos hechizos e idear estrategias de invocación únicas para superar las defensas de tus enemigos.