Cuando sueñas con trabajos de conductor fantásticos, nada supera un servicio de transporte al aeropuerto. ¡Y JFK es el estrellato, nene! Viajeros gruñones y turistas despistados, todos necesitan llegar al estacionamiento. ¡Y TÚ eres el héroe! ¡Esfuérzate por las propinas, recuerda obedecer todas las señales de tráfico y, por favor, date prisa!