Coloca a los defensores para detener las oleadas de enemigos. Se vuelven más fuertes y rápidos de nivel en nivel. Así que necesitas mejorar tus unidades para mantener la situación bajo tu control. Combina la colocación estratégica de unidades de defensa y mejóralas cuando sea posible, y destruye las hordas de orcos, goblins y otras criaturas que quieren destruir tu castillo y derrotarte.