¡Hay un dinosaurio sediento de sangre a tu espalda! No puedes molestarte en bajar una roca y volver a subir otra. Tienes que usar el palo para pasar al otro lado. ¡Asegúrate de que el palo sea preciso, de lo contrario te caerás o te comerán! ¡Y no olvides recoger los huevos del dinosaurio!