Como en la primera parte de Don't Escape, en lugar de escapar de la habitación, tienes que encerrarte. Esta vez no estás solo: hay gente alrededor que podría ayudarte si tú les ayudas. Explora varias ubicaciones y encuentra cosas que necesitarás para asegurar tu escondite. Pero ten cuidado con el tiempo que pasa... La horda de no muertos se acerca y no esperarán para siempre a que estés listo...